PSICOLOGIA
TERAPIA
La Terapia psicológica es un espacio donde se pueden resolver problemas personales o simplemente reflexionar sobre temas relevantes que interesen a quien acude a este servicio.
Dice el psicólogo argentino Jorge Bucay, que ser terapeuta es el oficio de “acomodar sentimientos” y tiene razón, ya que al estar fuera del contexto emocional de la persona que acude a la terapia se facilita la observación y análisis de manera imparcial y objetiva, ayudando a que la persona que acude al servicio psicológico pueda organizar, jerarquizar, evaluar sus sentimientos para tomar las decisiones más pertinentes, a partir de elaborar objetivos y metas congruentes y realistas, facilitando la solución del conflicto, en un trabajo hecho de manera conjunta (terapeuta-paciente).
Las personas que deciden acudir a terapia psicológica tienen la ventaja de haber aceptado que deben modificar algo en sus vidas y, por esta razón llegan motivados a las sesiones, situación que aprovecha el terapeuta, puesto que ya se tiene una parte de la dificultad solucionada: primero, ya se recapacitó sobre el problema y se aceptó y, por eso se acude con un profesional y segundo, ya se está preparado emocional e intelectualmente para enfrentar el evento problemático.
Resulta complicado a la mayoría de las personas aceptar que se tienen comportamientos inadecuados que deben modificarse y que estos sean la razón de tener relaciones inadecuadas que provocan pérdidas económicas, insatisfacción en el trabajo, problemas en la escuela, con la pareja y en la familia; es decir, de que somos los responsables directos (no son los demás), de no llevar a cabo los proyectos de vida que son importantes para la realización personal, de no modificar las conductas que provocan malas relaciones humanas. El temor para aceptar la realidad, es la llamada resistencia al cambio (característica de los seres humanos), ya dice el dicho adoptado por todas aquellas personas que se resisten a modificar: “es mejor malo por conocido que bueno por conocer”. Esta resistencia al cambio es trabajada en terapia para que no entorpezca el desarrollo emocional y armónico, utilizando diferentes alternativas, técnicas y un análisis de sus causas y repercusiones.
Son tan importantes las relaciones interpersonales que la parte de la población que mantiene relaciones inadecuadas se encuentran frecuentemente en hospitales, recluidas en un psiquiátrico o purgan una condena en un reclusorio en los casos más severos o en su defecto, están inmersos en relaciones de amor-odio e insatisfactorias; el factor común son las relaciones humanas deficientes.
Las relaciones humanas exigen que modifiquemos constantemente nuestro comportamiento ante la necesidad de ajustarnos a la etapa del desarrollo de las personas que nos rodean. Una persona está en constante transformación y las conductas que en el pasado teníamos con ella, con el tiempo se tienen que modificar, por ejemplo: a un niño se le pide que se duerma a las ocho de la noche cuando está en la primaria, está regla se modifica cuando es un adolescente y, lo mismo sucede con la esposa, amigos, compañeros de trabajo y demás relaciones. Hay que tomar en consideración no nada más el cambio en los demás, sino también el que se opera en la propia personalidad a través del tiempo, cada edad trae aparejados cambios que modifican la perspectiva de vida, no es lo mismo la visión de una persona soltera a una casada, ni tampoco la de una casada sin hijos a la que si los tiene, existe diferencia en la percepción de los eventos de vida entre alguien que trabaja a quien ya se jubiló; un adolescente piensa y actúa diferente a una persona adulta y a su vez ésta difiere de un adulto mayor. Una reflexión crítica y exhaustiva en terapia ayuda a ubicar las posibles complicaciones que se presentan en la interacción con los demás, incidiendo en la modificación de las conductas para que sean asertivas y vayan de acuerdo al proyecto de vida individual.
La Terapia Psicológica ayuda a construir relaciones sanas, amorosas, maduras utilizando para ello técnicas para mejorar la comunicación, la asertividad y la inteligencia emocional, se revisan y utilizan las fortalezas y recursos de cada individuo para mejorar la autoestima y los matices de la personalidad que sean necesarios.
